Dos palabras

De Estado cero al consciente

Mis oídos despertaron impacientes,
otra vez el ruido de la noche
nubló la meditación inconsciente.
Dos palabras aparecieron
en un eco repentino,
eran: la voz de los anhelos
que gritaba a lo lejos,
eran: el fantasma del recuerdo
en una avalancha de sucesos,
eran: la silueta momentánea
confundida en movimiento.
Mis ojos atisbaron
entre las sombras procedentes,
el pasado era presente
en los misterios de la mente
y mi lucha fatigada
por el temor del tiempo ausente.
Dos palabras se escucharon,
ahogadas pero fuertes,
y en la nota prolongada
de la verdad que tanto cuece,
los sonidos lastimaban
porque el origen no era la fuente.

Octubre 4 de 2016